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Mañana 3 de Mayo se estrena en cines selectos de Los Angeles y Orange County la película mexicana Cinco de Mayo: La Batalla. Tuvimos el placer de hablar con Kuno Becker (Goal!, From Prada to Nada), Angélica Aragon (Cuna de Lobos, La Mujer de Mi Hermano) y el director Rafa Lara (El Quinto Mandamiento, Labios Rojos). Compartimos sus jugosas respuestas a nuestras preguntas y el audio completo de las entrevistas en mesa redonda.

Kuno Becker (General Ignacio Zaragoza)

¿Qué tan desafiante fue montar a caballo en la escenas de batalla?

Tengo la suerte de haber aprendido a montar desde muy chavito, monto desde los 3 años. El proyecto se me hizo muy atractivo por eso también. Me resultó muy divertido cabalgar entre las tropas, era como un juego. ¡Quería más escenas a caballo!

¿Cómo se convence al público que este “blockbuster” hay que verlo en cines?

Como actor reaccionas mucho a las circunstancias. Eliges un proyecto que consideras bueno para ti. Otros tienen razones estúpidas. Yo tengo las mías que creo no son tanto, lo hago por amor al oficio, tratar de evolucionar, de conmover a la audiencia. No puedo controlar tanto la historia ni decidir cómo se promociona como, si como “blockbuster” o “independiente” . Lo que me queda es tratar de hacer mi mejor trabajo y esperar que a la audiencia le agrade.

Angélica Aragón (Doña Soledad) y el director Rafa Lara

¿Tenían en mente más a los historiadores o a los jóvenes que tal vez están desconectados de la historia?

R.L.: A ninguno de los dos. Hago películas pensando en mí, más como espectador que como creador. Mi trabajo siempre tiene que ser profesional y muy exigente. Ese nivel de excelencia es el que nos une con Angélica, lo que la hecho una de las más grandes actrices que ha exportado este país. Tenía el apoyo de los historiadores de Puebla, no su supervisación. Creo que ésto fue absolutamente clave. Los inversionistas de la producción más compleja hecha en México me dieron absoluta libertad porque les gustaba la idea de contarla desde el punto de vista del pueblo y de una manera actual. Se hizo desde esa lógica, no por complacer a nadie.

En las escenas de acción combinas explosiones con caballos y más ¿Qué fue lo más difícil de armar ese rompecabezas?

R.L.: Primero que nada era convencer al equipo de que fuera posible sin que nadie saliera lastimado. Conceptualmente siempre quise que la cámara fuera una maquina del tiempo que transportara al espectador a los días del México en 1862. No quería hacer un espectáculo de fuegos artificiales, que era una tentación facilísima: Si tengo todo este presupuesto y todos estos extras tomo una grúa y muestro el show. Nadie vuela, entonces no tengo que verlo desde arriba. Tampoco tengo que usar dolly porque los seres humanos no nos deslizamos como fantasmitas. Queríamos que en las escenas de batalla e intriga tuiveras la sensación de estar parado ahí, mirando.

Lo hicimos con un gran equipo de “stunts”, efectos especiales de primer nivel, y en tiempo récord, 9 semanas. En Estados Unidos hubiese tomado 25 a 30 semanas y costado 100 millones de dólares. No teníamos ni la décima parte de ese presupuesto. Creo que la película lo merece, que no se siente chiquita o “wanna be”, que ha logrado un alto nivel de espectacularidad.

A.A.: En la película también participó el ejército mexicano. Muchos de los caballos y los extras son del ejército. Ellos ayudaron a entrenar a los extras en las escenas de combate.

“Cinco de Mayo: La Batalla narra la historia de la Batalla de Puebla, la más importante en la historia de México. Cuando el ejército francés invade México para establecer una monarquía, el general Ignacio Zaragoza interpretado por Kuno Becker (Goal!, From Prada to Nada), debe defender la ciudad de Puebla, al mando de una tropa de hombres mal armados y superados en número. Cinco de Mayo relata la valentía de un pueblo empujado al límite, luchando por su país, su familia y su orgullo.”